100.000 Visitas

Si fuera astronauta diría algo como:
Este es un número muy grande para un blog tan pequeño.

Cuando empecé “Peor es Nada”, no tenía en mente muchas cosas, no sabía que tipo de satisfacciones me daría el blog. Ni siquiera que iba a ponerle un contador de visitas, lo cual me está permitiendo hacer este post.

A mí me resulta estimulante saber que en sólo un año y ocho meses, desde julio del 2004, hasta este momento, por aquí han pasado una cantidad de personas suficientes, como para haber sumado este número tan importante de visitas. Yo sinceramente espero poder haber dejado algo positivo en cada uno de ellos.

A veces me pregunto si a la gente le gustan las cosas que escribo, otras veces me pregunto si las leen. Hasta ahora han sido 244 posts publicados en el blog. Creo que puedo continuar haciéndolo, con esto espero no haberle dado una mala noticia a nadie.

A lo largo de este tiempo he escrito muchas historias, bastantes se han quedado en el papel, unas porque son muy largas, otras porque son muy autobiográficas y otras por que en ellas cuento algunas maravillas acerca de mi familia y de mis padres, que ya no están y que fueron para mi un ejemplo de una relación profundamente romántica y envidiable. De ellos tengo muchas historias bonitas.

Entre las que me he atrevido a publicar con las características mencionadas están: El gran secreto, El Examen de Piano, Un Juego muy serio, estas dejaron de ser privadas al compartirlas, lleno de orgullo, con todos ustedes.

Hace un tiempo leí en un blog, que estos se habían convertido en un lugar común, donde muchos escribían acerca de las maravillas propias y las de sus allegados. Es verdad, no se si esto sea muy criticable, pero ha hecho que yo, de alguna manera me autocensure (palabra tristemente de moda en Venezuela). Estoy seguro que mas adelante publicaré algunas de estas historias que tengo en cuartillas dobladas dentro de la cajita de madera, donde atesoro secretos, y cositas insustituibles que finalmente no sirven para nada, pero que me gusta guardar.

Al final Internet es muy libre, si el visitante lee y no le gusta se va, si le gusta se quedará leyendo y si le gusta mucho, hasta podría comentar.

A mi el blog me ha resultado una gran vía de escape de las durezas propias de la inmigración. En el publico mis cuentos imaginando que tipo de pensamientos afloran en el lector, estableciendo así, una forma especial de comunicación que llega a su cenit a través de los comentarios.

Gracias a todos por visitar este modesto lugar, mi casa, donde me muestro tal cual soy.