<body><script type="text/javascript"> function setAttributeOnload(object, attribute, val) { if(window.addEventListener) { window.addEventListener('load', function(){ object[attribute] = val; }, false); } else { window.attachEvent('onload', function(){ object[attribute] = val; }); } } </script> <div id="navbar-iframe-container"></div> <script type="text/javascript" src="https://apis.google.com/js/platform.js"></script> <script type="text/javascript"> gapi.load("gapi.iframes:gapi.iframes.style.bubble", function() { if (gapi.iframes && gapi.iframes.getContext) { gapi.iframes.getContext().openChild({ url: 'https://www.blogger.com/navbar.g?targetBlogID\x3d7560847\x26blogName\x3dPeor+es+Nada\x26publishMode\x3dPUBLISH_MODE_BLOGSPOT\x26navbarType\x3dBLACK\x26layoutType\x3dCLASSIC\x26searchRoot\x3dhttps://peoresnada.blogspot.com/search\x26blogLocale\x3des_419\x26v\x3d2\x26homepageUrl\x3dhttps://peoresnada.blogspot.com/\x26vt\x3d8853004166748984398', where: document.getElementById("navbar-iframe-container"), id: "navbar-iframe" }); } }); </script>

miércoles, 14 de marzo de 2007

Capuccino y torta de zanahoria.


Holanda nos ha enseñado a apreciar mucho los días de sol, por eso, cada vez que esto ocurre, lo celebramos como una gran fiesta ancestral de agradecimiento a los dioses por el milagrillo climático, pues en Holanda si no está lloviendo, es porque acaba de escampar.

Así que este sábado, disfrutamos de un día esplendoroso, con mucho sol, aunque hacía frío.

Salimos al centro y como en un rito primitivo, nos llenamos de luz, de vitalidad y de alegría de vivir, estos son los riesgos que se corren cuando se disfruta sin complejos las cosas sencillas de la vida, y es que por cualquier tontería anda uno por allí gozando un imperio, sin ton ni son.

Caminamos mucho por las estupendas y antiguas calles del centro, comprando algunas cositas para mi inminente viaje a Caracas, en una semana. Viendo tiendas, casas, rincones y canales, en un periplo que concluyó en el mercado de la plaza “De Hof”, el gran mercado del pueblo, donde hay de todo, incluyendo varios “viskraam”, que no son mas que puestecitos de venta de pescado frito, que aquí, proliferan por todas partes, comimos “kibbeling” trozos de pescado empanizado riquísimo, lo hicimos opíparamente, sentaditos en la fuentecita de la plaza, como lo haría cualquier lugareño. ¡Y es que al final ya lo somos!

Continuamos la caminata, para que bajara el pescado, deleitándonos como simples turistas, sorprendiéndonos con todo lo que veíamos, que aunque ya conocíamos, no dejan de gustarnos y de llamarnos la atención, pues con tanta luz podíamos ver detalles que no habíamos descubierto antes.

El frío apretó un poco y recordamos el nuevo café de nuestra amiga holandesa, pensamos: Un rico capuccino y una worteltaart, o sea una torta de zanahoria, y calorcito, apenas nos acercamos, nos atendieron como si fuéramos los burgomaestres de la ciudad, al vernos, ágilmente el anfitrión se desplazo hasta la puerta, la abrió y con una amplísima sonrisa nos convidó a entrar, apenas nos sentamos en la mesa, la dueña, quien es una chica muy simpática, se sentó con nosotros por un rato, para echarnos los cuentos de los días posteriores a la reciente inauguración, que por lo visto le va muy bien, cosa que nos alegra un montón. Siempre es así cuando las cosas se hacen bien y con cariño.

Evidentemente nos sentimos muy bien atendidos. Y eso que teníamos en mente fue lo que pedimos, capuccinos y torta de zanahoria, sin lugar a dudas la más rica que he comido en mi vida.

16 Comments:

Blogger El Trimardito said...

Que gusto!!
A mí me ha tocado un lugar donde hay sol y buen tiempo, estoy disfrutando de él por ahora, porque quizás mañana le dé por llover a cántaros.
Saludos!

12:32 p.m.  
Blogger Oswaldo Aiffil said...

Hola Miguel! Qué bueno disfrutar, mucho más en buena compañía, de esos ratos tan bonitos de la vida. La torta de zanahorias, yo hago lo mismo aquí en Caracas, en Boston Bakery, y sabe muy bien. Claro, sin la nieve y sin el frío, sino con el clima cool de Caracas y mirando esa enorme y verde cortina que se asoma al cielo, el Avila.
Muy bueno que estés pedaleando. Eso es salud, fortaleza y entereza. Que lo disfrutes también!!

12:47 p.m.  
Blogger Oswaldo Aiffil said...

Por cierto Miguel, si en tu estancia por Caracas, después de tantos agasajos, visitas y negociaciones, te queda una hora, te invito esa torta en el Boston Bakery. No te sientas obligado, porque yo se que el tiempo es implacable y tres semanas pasan muy rápido, pero si tienes a bien serás invitado...

12:53 p.m.  
Blogger Miguel Pinto said...

Claro que si amigo Oswaldo, será un verdadero honor y placer compartir contigo una deliciosa torta de zanahoria frente a El Avila, que apuesto que será más rica que la de Amersfoort. Puedes dejarme tu número de celular o de teléfono en mi e-mail "peor.nada" en gmail.com para poder contactarte para ponernos de acuerdo.

2:14 p.m.  
Blogger JC de Wekker said...

Coño, verdad que uno aprende a apreciar esos días de sol sin nubes, así no haga calor las cosas como que se ven todas buenas, en cambio en Venezuela uno dice "cuando se aplacara este sol" jejeje, así que como a todos los seres humanos nos pasa, uno nunca esta contento con lo que tiene, pero si lo aprecia cuando lo pierde.

Un abrazo!!!

6:39 p.m.  
Blogger Miguel Pinto said...

Juan Carlos. Tienes toda la razón, nunca estamos contentos con lo que tenemos y nos enteramos cuando lo perdemos. 100% cierto.

11:43 p.m.  
Blogger Curiosa said...

Tipico del ser humano,extrañar lo que no se tiene. La idea es apreciarla cuando se tiene ;)
El capuchino, la torta de zanahoria y el frio se me antojaron jajaja

4:24 a.m.  
Blogger Cho said...

Hola Miguel!
Y ahora vas a sentir el sol caribeño con el mejor calor humano...
Que tengas un maravilloso viaje!

9:35 p.m.  
Blogger mardevientos said...

No importa cuanto uno conozca las ciudades... Cuando el sol esta a pleno, se ven siempre cosas diferentes y se disfrutan mucho mas!

Lo de capuccino con torta de canahoria pense que era una broma.. pero no!!

COMO HICIERON!

Ah.. Buen buen viaje y disfruten de Caracas!

11:41 a.m.  
Blogger Morco said...

Verdaderamente el calor del Sol es siempre algo por lo que agradecer

Espero que se repita el buen clima este fin de semana

Un abrazo y nos vemos en el espejo

2:31 p.m.  
Blogger Waiting for Godot said...

A mi me pasa que no siento que llueva tanto en Holanda como siente la mayoría, yo soy de las que disfruto todo y todo, aquí en Venezuela te esperamos con los brazos abiertos, el sol está picante pero sabroso, por cierto mandale un beso enorme a maria y a los chamos!!!!Besos para ud mi amigo!!!
;)

3:10 p.m.  
Anonymous Anónimo said...

Si andas por Caracas, avisa para buscar un momentico para saludarte en vivo y directo. Te escribo a tu mail.

3:54 p.m.  
Blogger Elier said...

Estos blogueros trotamundos tienen alborotado a un gentío y frente al frio europeo, los comentarios acuarelizan el bonito sol caribeño como muy agradable y el muergano nos está friendo como a los chicharrones de Los Teques, jeje..
Acuerdate de traer tus franelas mas frescas porque aqui hay un chaparron de sol que supera a veces los 34º, aunque Caracas esta mas fresca. (te aseguro que vas a notar la diferencia de los 30º con respecto a Amersfoort)

Un abrasivo y caluroso abrazo cocoroteño jeje

8:33 a.m.  
Blogger Unknown said...

Que rico lo del paseo...

Oswaldo llevame¡¡ Yo quiero ir colada¡

4:11 p.m.  
Blogger Mar said...

me encantan los dias soleados!
Por aqui hemos pasado unas FALLAS geniales, buen tiempo, solecito... aunque hoy está lloviendo.
Pero ya se sabe...el agua también es necesaria....saluditos

3:14 p.m.  
Blogger Patricia said...

Aun recuerdo los dias soleados en Holanda, escasos pero placenteros...dicen que es el ambiente y las personas las que hacen que algo se disfrute y se recuerde (como tu cafe y tu torta de zanahoria), yo jamas olvidare la torta de zanahoria que probe en Londres.

8:22 a.m.  

Publicar un comentario

<< Home